AYUDA LA
TRASCENDENCIA EN EL DUELO?
Según
El diccionario es la consecuencia o resultado de carácter grave o muy
importante que tiene una cosa, proyección. Es aquello que está más allá de los
límites naturales y desligados de ellos.
Según
el Diccionario del Instituto de Estudios Catalanes describe que la
transcendencia es lo que sobrepasa los límites de la realidad concreta.
En
Filosofía, el sentido más inmediato y
elemental de la voz transcendencia se refiere a una metáfora espacial.
Transcender (de trans, más allá, y scando, escalar) significa pasar de un
ámbito a otro, atravesando el límite que los separa incluyendo además la idea
de superación, significa la acción de sobresalir, de pasar de dentro a fuera
superando su limitación.
Hay
una parte de nosotros que muere con los que se van así como también hay una
parte de los que parten que no muere ya que viven en nosotros, este intercambio
de existencias lo hace posible el amor y en este amor se construye la
transcendencia.
Superar
el duelo no implica olvidar ni renunciar al recuerdo. Significa encontrarle al
que murió un lugar en nuestro espacio emocional para seguir viviendo de manera
eficaz. La respuesta del hombre al sufrimiento yace en la transcendencia y ello
implica encontrarle un sentido a la existencia de quien murió y un sentido a
nuestra vida aunque ellos físicamente ya no estén.
La
importancia de la autoayuda es fundamental, en cuanto a que podemos comprender,
al participar en un grupo de duelo, que no somos únicos en el dolor y de
requerir de los demás toda su consideración a nuestro drama, dejar de pedir
respuestas, que nadie posee, es probablemente el punto de inflexión, el momento
en que comienza en todo duelo su etapa reparatoria .
Comenzamos
a advertir que nuestra importancia no va más allá de la importancia de los
demás, que los demás también sufren y extrañan, hemos podido alzar la vista
para mirarnos en el espejo del dolor ajeno, ahora podemos escuchar, comprender
y comenzar tímidamente a ayudar, y es ese aspecto solidario que emerge de nuestro
propio sufrimiento, el que permite reparar y repararnos, sentirnos mejores
personas, y esto se logra sin duda, a partir de los cambios que en nosotros, ha
generado la ausencia.
En
el proyecto de vida aparecen valores de actitud, que apuntan a nuestro
crecimiento espiritual y convierte nuestro trabajo interior en un trabajo
transcendente que os prepara para dar ese “paso más”, ir un poquito más allá de
nuestro pequeño ego y así descubrir la Verdad que yace en nuestro interior.
En
mi caso con la muerte de Sergio mi transcendencia con él va más lejos, he
establecido contacto con ese misterio, me he dejado llevar y creo que llegará
el momento de estar con él, estoy más atento a estas circunstancias que nos
rodean y he llegado a la conclusión de que formamos parte de un ente mayor,
algo que nos supera por completo al cual pertenecemos y del cual dependemos;
aquí venimos a aprender unas lecciones y una vez aprendidas volvemos a nuestra
“casa”, y esto y muchísimas más cosas ( que ahora no vienen al caso) me las ha
hecho ver mi hijo Sergio.