¿DE DONDE SURGE EL
SANADOR QUE SOY?
El día 18 de
Febrero del 2010 durante la reunión de voluntarios se propuso realizar un
trabajo de investigación en grupo y yo escogí el tema “¿De donde surge el
sanador que soy?, espero que alguien mas se apunte a este grupo pues de
momento estoy yo solo, aunque solos nunca estamos.
Es un tema que
me ha interesado siempre, pero no me he dado cuenta de lo importante que
era para mi, hasta el momento del fallecimiento de mi hijo, ahora va a hacer 5
años.
Para mi entender
a partir de ese momento, mas bien a partir de cuando me fui serenando un
poco tras ese golpe (el mas duro en mi vida), pude analizar, ver, interpretar,
comprender, aceptar y transformar toda mi vida, me he vuelto mas abierto,
susceptible, sensible, y han empezado a abrirse una serie de ventanitas
que siempre he tenido pero que estaban cerradas y es ahora cuando empiezo
a entenderme mejor. Y entre otras muchas cosas está lo de “sanador”.
Realmente creo
que empecé a darme mas cuenta durante el cursillo de “Acompañamiento del alma”
que realicé con Mari Lisse Labonté, allí comprendí lo que era la energía y como
poder trabajar con ella y sobre todo como sanarte y poder sanar; fue una
experiencia maravillosa en la cual me dio la sensación de que aquello para mi
no me era nuevo, allí pude notar y experimentar unas sensaciones en mi cuerpo
que no recordaba me hubiera pasado antes, fue tan impactante que incluso en esa
sesión me dieron dos taquicardias de las cuales me ayudaron a salir y
encontrarme mejor, fue como si me hubieran metido un “chute”.
Mas tarde
realicé otro cursillo: “I Nivel de Armonización energética” para el cual tuve
antes que hacer el I Nivel de Reiki.
Si en el
cursillo anterior estaba impresionado por lo que me estaba ocurriendo, no veas en
este, esto fue la iniciación a lo que creo que llevo de sanador.
Tanto me llenó
esta experiencia que a partir de ahí, en dos años hice primero los tres Niveles
de Reiki y al año siguiente la Maestría y ahora soy Maestro de Reiki Usui
Tibetano, Reiki tradicional Japonés-Komyo, Karuna y Reiki Combat.
Esto me ha
llevado a poder estar más equilibrado y cada día me hago Reiki para ir sanando
todos mis karmas que llevo encima en esta vida y estoy convencido que también
de vidas anteriores.
Voy
consiguiendo poco a poco conocerme mejor, preguntándome en mi interior cómo
soy, a qué corresponden mis comportamientos, de donde vienen, etc, etc. y así
voy creciendo e intento ser mejor persona, y cada día voy sanando, pero siempre
van saliendo nuevas cosas a las que intento poner solución, porque creo que de
esta manera estando yo bien es cuando yo puedo ayudar a los demás, sino no
podría hacerlo.
Me he dado
cuenta que uno de los trabajos que he venido a realizar en esta vida es el de
servicio a los demás y creo que entre otras cosas la más importante
debe ser la de “sanador”.
En la historia
del mundo, en la que conocemos, siempre ha habido la figura del sanador, uno de
los mas importantes, por lo menos para mi, ha sido Jesucristo, el curaba con la
manos y su técnica estaba basada en “amor-servicio-sacrificio”. En la Biblia y
otros escritos esta lleno de casos de sanación.
También han
existido y existen en otros países y culturas, “sanadores”, como los Gurús
Indios, Chamanes de México, Perú y más países, hay muchas técnicas de sanación,
como Reiki, masajes de muchísimos tipos, Acupuntura, etc.etc.
A medida que
voy practicando Reiki me voy encontrando, más completo, lo cual hace que pueda
ir recordando cosas que tenía olvidadas, o más bien guardadas en el disco duro
de mi cerebro y ahora de vez en cuando se van abriendo y revelando porque
estaban ahí esperando su momento para salir a la luz.
Por ejemplo, de
pequeño yo jugaba a fútbol en un equipo y no se porqué cuando ocurría alguna
lesión por el juego, (teníamos un masajista pero de vez en cuando, por lo menos
para mi y mas tarde para la mayoría de compañeros) me ponía a dar masajes a mis
compañeros y mejoraban mas rápidamente, antes no me había dado cuenta de esto,
es ahora que me vienen a la mente situaciones que nunca me había parado a
pensar y que ahora puedo darles una explicación.
De hecho todos
de pequeños cuando nos hacíamos daño, nuestros padres o nosotros mismos nos
frotábamos en el sitio donde teníamos el golpe y normalmente enseguida sanaba
y... a seguir jugando.
De una manera u
otra hemos tenido y tenemos ese don, o como quiera llamarse, de curar, y está
en nosotros mismos, lo que pasa es que lo ignoramos o no le sabemos dar el
verdadero valor que tiene.
No obstante, he
observado en mí que esta situación que ahora tengo con respecto a las energías
y la sanación me llena mas de lo que me hubiera podido imaginar y creo
que debe de ser una de las cosas que he venido a realizar en esta vida y que
este sentimiento que llevo dentro y que cada día es mayor debe de venirme de
más atrás, de vidas anteriores, así que me lo voy a tomar como una
experiencia que debo realizar conmigo y hacia los demás.